Serenade of the Seas es el segundo barco de la clase Radiance de royal Caribbean. Con capacidad para hospedar hasta a 2.476 pasajeros, es una de las embarcaciones más pequeñas de la flota, sin embargo ofrece la combinación perfecta entre aventura y relajación. Sus modernas instalaciones repartidas por las 13 cubiertas del barco harán de tus vacaciones una experiencia divertida e inolvidable.
Además de sus increíbles instalaciones, Serenade of the Seas cuenta con varias opciones de restaurantes y una amplia oferta en entretenimiento. Este barco tiene algo que deja a quien lo prueba completamente enamorado.
Cuenta con grandes ventanales de cristal alrededor de prácticamente todo el exterior del barco, dejando entrar la luz natural y ofreciendo unas magníficas vistas en todo momento.
Mantenerse en forma es un poco más fácil a bordo de este barco, que pone a la disposición de los pasajeros un gimnasio totalmente equipado, un rocódromo, una pista de baloncesto y otra polideportiva. Si lo tuyo es entrenar en equipo, podrás apuntarte a alguna de las competiciones o partidos, y si por el contrario buscas descansar, nada como una sesión relajante en el Spa o en el solarium, cuya entrada solo está permitida a adultos.
Serenade of the Seas es un barco perfecto para familias, los niños lo pasarán en grande en el Adventure Ocean, Royal babies y el Tots Nursery dependiendo de la edad, donde estarán entretenidos, felices y cuidados por un equipo de profesionales cualificados.
Camarotes en Serenade of the Seas
Los camarotes son tan impresionantes como el resto del barco. Cuenta con más camarotes exteriores que cualquier otro barco de la flota de Royal CAribbean para que disfrutes de las magníficas vistas al mar desde tu habitación.
Si quieres disfrutar de un poco más de espacio extra, nada como los camarotes con balcón para disfrutar de una copa de vino o de un desayuno desde la tranquilidad de tu habitación.
Todos los camarotes están totalmente equipados y cuentan con ropa de cama de primera calidad, TV, minibar y mucho más.
Estuvo todo muy bien. Sólo algún pequeño malentendido en el restaurante que el jefe del mismo solucionó satisfactoriamente.
